Sin embargo, no se alegren de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos”. (Lucas 10:20) Muchas veces nuestra alegría viene cuando vemos el fruto de nuestras buenas obras o ministerios. Pero nuestro ministerio o trabajo nunca debe ser lo que determina nuestra alegría o gozo.Read more